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23 de enero de 2007

¿Tocará Héroes?

Que los héroes existen es un hecho sabido por todos, pero ¿y las leyendas?. Esos cuentos que nunca sabes si cuentan una verdad tergiversada o una mentira narrada de tal manera que pondrías la mano en el fuego por su veracidad. Pues bien, entre la fantasía y la realidad se encuentran esos pequeños relatos, y en estas líneas se contará una de esas leyendas que va camino de hacerse realidad. Esa leyenda es de Fútbol y Rock, Héroes y Zaragoza. Va de fama, de adoración, de milagros, de ilusión y de esperanza. Es la confirmación que el incrédulo necesita para tener fe; y es la fe del que nunca desesperó y creyó en los milagros. Es el regreso de Héroes del Silencio.

Mucho se ha hablado del posible reagrupamiento de una banda que ha despertado pasiones allá donde ha ido, pero esta vez los rumores cobran vida para convertirse en hechos. Como ya adelantó el ‘Periódico de Aragón’, en principio, los cuatro miembros del grupo musical podrían volver al escenario en las Fiestas del Pilar, en el que sería su único concierto en España. ¿Pero, por qué ahora? La respuesta es clara: muchos interesados y un solo fin. La casa de discos Emi es la principal promotora del proyecto, al que se suman el ayuntamiento de Zaragoza, la sociedad promotora de la Expo 2008, Expoagua y, sobre todo, el Real Zaragoza, ya que el concierto de los Héroes sería uno de los principales actos del 75 aniversario del club.

Respuesta: 1 de febrero

Pero en esta operación no hay que descuidar el factor económico, ya que en este caso es uno de los principales alicientes para el regreso del grupo. Los cuatro ‘héroes’ percibirían unos 6 millones de euros por volver a hacer sonar sus legendarias notas. Una cifra que financiarían Telefónica y alguien más. Y como todos los tratos importantes, este tiene una fecha de cierre: el próximo 1 de febrero está marcado en el calendario para obtener un “sí” o un “no” de Enrique Bunbury, Juan Valdivia, Joaquín Cardiel y Pedro Andreu. Pero la balanza y la realidad de esta leyenda se decantan hacia lo afirmativo.

Ninguno de los cuatro miembros del grupo ha sido un forofo reconocido del fútbol, pero sí han acompañado al Real Zaragoza en sus alegrías y penas. Alguno de ellos guarda todavía una estrecha relación con los jugadores que militaban hace unos años en el equipo aragonés. Enrique Bunbury, por ejemplo, participó de la gran fiesta que se organizó por toda la ciudad cuando el equipo logró el ascenso a Primera División, y en la sala Oasis de Zaragoza, a capella y enfundado en la camiseta blanquilla cantó varias de sus canciones, para regocijo de los allí presentes.

Sin dejar de lado las celebraciones, el Real Zaragoza y los Héroes del SIlencio tienen más similitudes de las que se pueden apreciar a simple vista. El panorama del rock giró la cabeza hacia la capital aragonesa a mediados de los años ochenta. Por aquel entonces, cuatro músicos de casta, a los que les sobraban ideas y se morían de ganas por darlas a conocer, comenzaron su andadura. Fue en 1985, cuando grabaron su primer disco, pero hasta un año después en el 86 no se subirían a un escenario. El concierto en las fiestas del Pilar abrió la lata del éxito. Un concierto que cumplió, el pasado mes de octubre, 20 años.

Mientras comenzaban los éxitos de cuatro jovencísimos soñadores, el Zaragoza se alzaba con el título de la Copa del Rey. En Madrid, con un Vicente Calderón a rebosar, Rubén Sosa marcó el gol de la victoria zaragocista para que Juan Señor levantara el trofeo, ante un perplejo Barcelona que vio cerrada su participación como finalista.

Este año, el Real Zaragoza cumple 75 años, y también podría ser una fecha significativa en el calendario de los Héroes del Silencio. Marquen en rojo el 2007 porque las leyendas de héroes, de fútbol, de dinero, de fama, de adoración, de milagros, de ilusión y de esperanza, se convierten para el fútbol y para la música en una realidad.

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