Jornada 34: "Billete de vuelta a la realidad"

Ya he vuelto. Después de mi periplo vírico, ya estoy en casi perfectas condiciones de volver a mi amado blog. Y digo en casi perfectas condiciones porque en el partido de ayer que jugué me doblé el pie derecho y ahora parezco House sólo que sin bastón (Jaaaaaauuuuuus). Dicho lo cual, ahí va mi peculiar visión de la jornada.

Se acabó el sueño. Era la crónica de una muerte anunciada. Yo me intentaba animar diciéndome que el siguiente partido era el importante pero si se falla ante Nástic, Mallorca, Racing y Valencia no se puede aspirar al máximo premio europeo. Primero dejamos de seguir el ritmo del Sevilla y de ser terceros pasamos a estar cuartos y con el Madrid por delante. Peleamos con honor con el equipo de la capital pero fue imposible seguir el ritmo capelliano y nos asentamos en la quinta posición. Aquella era la última parada del tren. Nos subimos en varias ocasiones y cojimos billete de ida hacia al cielo. Coqueteamos con poder asaltar Europa al año que viene, con escuchar el himno de la Champions en la Romareda y una larga lista de etcéteras que cada cual tiene en su mente.

Sencillamente, no pudo ser. Era el partido clave. Si se ganaba, nos situábamos a un punto de la Champions, gol-average a favor... bueno, que no quiero pensar en lo que podría haber sido y no no fue. Ahora estamos quintos después de hacer la risa durante 70 minutos en Mestalla pues el verdadero Zaragoza sólo se reconoció al inicio de la segunda mitad. La primera fue de Silva. Ese Zaragoza el que nos ha enamorado, el Zaragoza en el que suben los laterales hasta línea de cal y centran al área, el Zaragoza de las paredes imposibles y de los regates sin inventar, el Zaragoza de la casta y poderío defensivo... pero ese Zaragoza necesita 90 minutos para ganar en Mestalla, y no 20.


De todas formas, ya se me ha pasado el enfado de ayer y no quiero volver a ello. Estamos quintos. Europa se abre para recibir a un Zaragoza que ya se le considera grande. Este proyecto que he nombrado al principio estaba hecho para que este primer año se asentarán las bases. Se planteó el difícil objetivo de entrar en Uefa vía la Liga. Y casi se ha conseguido. Ahora, ya no trabajamos para conseguir un sueño sino para defender la realidad. Toca ganar al Bilbao en casa y ya está. El tren de la Champions ya ha zarpado. Al de la Uefa aun le quedan un par de paradas en Zaragoza. Más vale que despierten los jugadores y se reserven un billete de vuelta a la realidad.

Y la realidad es que el Madrid que estaba desahuciado en diciembre, el Madrid en crisis interna, se ha colocado líder. Realizó una remontada épica en el Bernabeu y dejó sin premio a Pandiani y 10 juveniles más del Espanyol (Jajaja Malgani). La gesta estuvo cerca y el "Pandianazo" ya se cantaba desde Barna... pero apareció el capi. Metió el 2-3 al empezar la segunda parte y se aferraron al famoso espíritu de Juanito para asestar al Espanyol. Y al final, en el último suspiro, Jiguaín (sí, sé que lo he puesto con J) puso el broche de diamantes a la noche blanca. El Madrid se acostó líder y allí que sigue. Ya se añoraba un final de Liga emocionante. Hagan sus apuestas.

Las apuestas ahora pasan por Glasgow. Sevilla y Espanyol se batirán por la gloria europea en una final española sin precedentes. El Sevilla hizo sus deberes ante un Recre que, incluso merece esa sexta plaza liguera. El Atléti no puede dormirse y el Zaragoza espero que suba las revoluciones en esta recta final porque como se tenga que jugar la sexta en el Colombino onubense... tocará rezar a todos los santos conocidos.

Rezar es lo que le queda al Celta. ¿Cómo puede jugar tan mal un equipo que tiene entre sus filas a Baiano, Nené, Oubiña, Gustavito o Pinto? Esa no es la pregunta ahora sino, ¿se salvará el Celta o frente al Levante de Riga ha sentenciado su muerte? Stoichkov quizás tenga la llave de la salvación y todo pasa por ganar 3 de los 4 partidos que restan. Complicado o casi imposible.

"Imposible que se salve la Real" decían los entendidos por San Sebastián. Ja. Los Kovacevic, Savio, Prieto y demás no lo ven tan claro. Tras vencer al colista Nástic (que huele a carne de segunda, por cierto, menuda tubeta de Portigol) sus aspiraciones son más reales y de seguir así pueden soñar con la salvación y es que también hay muchos guipuzcoanos que dicen: "Al final siempre se salvan" ¿Cuál de los dichos se cumplirá? Toca esperar.

Esperar a que empiece una nueva Liga debe de estar el Mallorca porque si esta durase más habría que incluirlo en los aspirantes a la Liga. Gana en casa, gana fuera. Esa no es la media inglesa sino la media ensaimada. El Racing ya ha dado cuenta de ella y su sueño europeo se desvanece. Y más tras perder a Zigic, Munitis y Vitolo para el siguiente partido. Dura papeleta.

Papeleta para los getafenses que defendían la gloria ante su público y frente al Atléti. Pues al final 1-4 con golito del Gordo Maniche. Buaaa. Partidazo del luso y partidazo también del niño, que metió sus dos golitos. Que pena que le hubieran cambiado y no pudiera tirar el penalty que le habría dado el hattrick. Bueno no, que lo habría fallado jeje. A lo tonto, la Uefa ya casi se huele y los azulones pensando en la final copera. A fin de cuentas, la Liga ya no es su lucha pues en Europa van a estar igualmente. Ah! Golito de Güiza, que no podía faltar.

No podía faltar tampoco la derrota de los navarros. Madre que racha llevan desde aquella semifinal de Uefa. Y para colmo, se llevan un 1-4 del Villarreal que vuelve a soñar con Europa. Hattrick de Forlán con golazo marca de la casa. Y ya van 15.

La 15 no, pero Sobis le hizo al Barça la 13. Golito en el 88, empatito y el Mashote pa' casa. En Barcelona están que trinan, que si cambio de ciclo por aquí, que si pañolada en la era Laporta por allá. Si no ganan la Liga aquello puede ser una bomba de relojería. La cara del gran Puyol lo dice todo. Esto es un descontrol. Una Farça.